En la edad Media se produjo el cisma, la ruptura de Oriente.En el siglo IX, Focio, patriarca de Constantinopla, acusó a Roma de haber corrompido la fe porque enseñaba, y rezaba en el Credo, que el Espíritu Santo procede del Padre "y del Hijo" (Filioque) (cfr. Catecismo, 246-248).
En el siglo XI el patriarca Miguel Cerulario renovó las acusaciones de Focio y fue excomulgado, consumándose la ruptura o Cisma con que una parte de la Iglesia en Oriente se separó de la sede de Roma, sustrayéndose a la autoridad del Romano Pontífice, León IX.
Puedes continuar viendo la serie de documentales sobre la Iglesia Ortodoxa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario